Uno de los temas recurrentes en las Escrituras es el juzgar a los demás.
En esta publicación, exploraremos algunos ejemplos de Juzgar en la Biblia, y cómo estos pasajes pueden enseñarnos a ser más compasivos y misericordiosos con los demás.
La Biblia es una fuente de sabiduría y enseñanzas que ha sido estudiada y seguida por millones de personas a lo largo de la historia.
- En Lucas 7:36-50, una mujer pecadora es juzgada por los fariseos mientras Jesús está cenando en casa de un fariseo. Ella se arroja a los pies de Jesús y comienza a llorar, lavando sus pies con lágrimas y peinándolos con sus cabellos. Los fariseos se burlan de Jesús por permitir que una mujer pecadora se le acerque, pero Jesús les dice que él no juzga a nadie, sino que los ama a todos.
- En Juan 8:1-11, una mujer adúltera es llevada ante Jesús por los escribas y los fariseos, quienes la acusan de haber cometido adulterio. Jesús les dice que el que esté libre de pecado, sea el primero en arrojar una piedra contra ella. Todos se van, dejando a la mujer con Jesús, quien le dice que no peque más.
- En Números 12:1-15, se relata cómo María y Aarón critican a Moisés por haber tomado una esposa etíope, lo que consideran como una acción impropia para un líder de su pueblo. Dios se enoja con ellos por juzgar a Moisés de esta manera y les dice a través de una nube que Moisés es su elegido. Aarón y María se arrepienten y se disculpan con Moisés.
- En Lucas 18:9-14, Jesús cuenta una parábola sobre dos hombres que oran: un fariseo y un publicano. El fariseo se jacta de sus buenas acciones y juzga al publicano, pero Jesús enseña que Dios acepta al publicano, quien reconoce su pecado y pide perdón, más que al fariseo que se cree justo.
- En Mateo 3:7-12, Juan el Bautista critica a los líderes religiosos de su tiempo, los fariseos y los saduceos, al juzgarlos como «generación de víboras» y llamándolos a arrepentirse y convertirse para ser bautizados. También les acusa de depender de sus genealogías para justificar su posición religiosa en lugar de depender de la gracia de Dios. Juan les advierte que el Mesías está llegando y que deben prepararse para recibirlo con un corazón arrepentido.
- En Galatas 2:11-21, Pablo critica a Pedro por su hipocresía al comer con los gentiles y luego, cuando llegan los judíos, dejar de hacerlo para no ofenderlos. Pablo lo llama «hipócrita» por no actuar con coherencia en su fe y lo reprende por ceder a las presiones de los judíos, lo que va en contra de la verdad de la gracia de Dios. Pablo defiende la idea de que todos los creyentes, tanto judíos como gentiles, son iguales ante Dios y no deben ser juzgados por sus acciones externas.
- En Mateo 23:13-36, Jesús critica fuertemente a los fariseos y a los escribas por su hipocresía y su tendencia a juzgar y condenar a los demás. Les dice que se preocupen más por su propia vida espiritual y por ayudar a los necesitados, en lugar de juzgar a los demás.
- En Juan 8:48-59, los judíos juzgan a Jesús, diciendo que él es un samaritano y no tiene ningún derecho a hablar en nombre de Dios. Jesús les dice que él es el Hijo de Dios y que aquellos que no creen en él están condenados.
- En Juan 9:1-41, un hombre ciego de nacimiento es curado por Jesús. Los fariseos comienzan a juzgarlo, diciendo que él no puede ser un profeta de Dios, ya que sanó al hombre en sábado. Jesús les dice que ellos son los que están ciegos espiritualmente, y que él es la luz del mundo.
La Biblia nos presenta varios ejemplos de personajes que juzgan a otros, tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento.
Sin embargo, también nos enseña la importancia de ser compasivos y misericordiosos con los demás, y de no juzgar a los demás basándonos en prejuicios o rumores.
Al estudiar estos pasajes, podemos aprender a ser más como Dios, que ama y perdona a todos, y menos como los fariseos y escribas que juzgan a los demás.
Date una pasada por nuestra publicación: Juzgar en la Biblia: ¿Qué Dice la Biblia Sobre Juzgar al Prójimo? que te ayudará a profundizar en este importante tema.
